Este sesgo cognitivo describe cómo las personas con bajos niveles de habilidad tienden a sobreestimar sus capacidades. Cometen errores y toman decisiones equivocadas, pero su falta de conocimiento les impide reconocerlos. Esto genera una confianza excesiva y una falsa percepción de superioridad.
Por el contrario, quienes poseen mayores competencias suelen subestimar sus habilidades y dudar de sí mismos. Esta paradoja psicológica nos acompaña en muchos ámbitos de la vida, especialmente en entornos profesionales y académicos.
Dunning y Kruger se inspiraron en frases célebres como:
"La ignorancia genera confianza más a menudo que el conocimiento" - Charles Darwin
"Uno de los problemas de nuestro tiempo es que los ignorantes están seguros de todo y los inteligentes, llenos de dudas" - Bertrand Russell
"La ignorancia genera confianza más a menudo que el conocimiento" - Charles Darwin
"Uno de los problemas de nuestro tiempo es que los ignorantes están seguros de todo y los inteligentes, llenos de dudas" - Bertrand Russell
Recordar este efecto nos ayuda a ser más conscientes de nuestras limitaciones y a fomentar una actitud de aprendizaje continuo.