lunes, marzo 23, 2020

Convivencia en tiempos de crisis


Paco Javier P. Montes de Oca, psicólogo evolutivo y social
La adolescencia es una etapa crítica de la vida que merece una especial atención por parte de las Ciencias Humanas, Médicas, la Educación y las familias. De todos es sabido que los adolescentes muestran rasgos psicológicos típicos de la edad como rebeldía, cambios de humor, deseos de una mayor independencia, dudas sobre sí mismos, su cuerpo, la sexualidad etc. Conjunto de comportamientos que pueden desconcertar, a veces, alarmar a los padres que se ven impotentes a la hora de afrontar diferentes situaciones que se puedan dar en el hogar. Atendiendo a esta necesidad aporto algunos consejos que puedan servir a padres y familia en estos momentos críticos de confinamiento obligatorio:
Ayudarles a comprender la situación y normas impartidas por las autoridades políticas y sobre todo sanitarias.
Que colaboren en las tareas domésticas y entretenimiento con hermanos menores si los tienen.
Disponer, con régimen de rutinas diarias, de horas para el estudio de materias escolares con la ayuda que le puedan prestar los padres o uno de ellos si se encuentran en régimen de visitas por separación o divorcio.
Disfrutar, conjuntamente, padres e hijos en actividades de ocio: juegos, ver películas, música etc. Todo aquello que surja de la imaginación de cada uno, una y mutuo acuerdo.
Aprovechar para hablar, dialogar. Aclarar cuestiones que, en la vida cotidiana de trabajo o clases, no se pueden abordar con la profundidad y tiempo necesario.
Controlar el tiempo que adolescentes y niños dedican a los móviles, plasmas virtuales y ordenadores. Recordar que la OMS (Organización Mundial de la Saluda) ha informado que dedicar, en especial por adolescentes, jóvenes y menores, cuatro o más horas diarias a estar conectado a este tipo entretenimiento equivale a una adicción similar al alcohol o las drogas.
Usar las redes, móviles y teléfonos, de forma moderada, para conectar con amistades que sirvan de unión y fomento del afecto y ayuda mutua.

Con todo el afecto, a su disposición, junto con el equipo de orientación del grupo parroquial y comunitario: .