lunes, septiembre 09, 2024

LA CONVERSIÓN PASTORAL EN PARROQUIAS

ENLACE AL DOCUMENTO: https://press.vatican.va/content/salastampa/es/bollettino/pubblico/2020/07/20/inst.html#

DOCUMENTO DE LA SAGRADA CONGREGACIÓN PARA EL CLERO

En julio de 2020 la Congregación para el clero dedica un documento a la comisión pastoral en parroquias. Intuye uno que desde ese foro se piensa que puedan ser precisamente los curas los que estemos frenando la conversión pastoral en parroquias; por eso lo hace no el dicasterio de evangelización sino la congregación para el clero. Así lo interpreto yo. Voy a hacer un breve comentario de este documento invitando a leerlo y sobre todo a dialogar porque hay afirmaciones que yo no sé si los hechos que tienen en el fondo son los que yo digo o son otros.

En primer lugar la introducción trata una sola cuestión: el Papa quiere caminos nuevos. Quiere creatividad. Es interesante ver este enfoque no tanto -como vamos a ver más adelante- de temor cuánto de deseo de que haya creatividad y caminos nuevos.

El capítulo 1 creo que trata 5 asuntos:
-el primero es que nos debe inquietar la cantidad de personas que carecen de la amistad con Cristo, con su fuerza, su consuelo y luz.
-una segunda cuestión, que creo que trata, es que nos mueva más el temor a encerrarnos que el temor a equivocarnos.
-un tercer asunto, de máximo interés a mi juicio, tomado del Concilio, está en que afirma literalmente que, en la relación con otras culturas, la Iglesia se enriquece
-un cuarto punto, que también creo que trata, es que valora positivamente lo logrado mediante el encuentro y cita “laudato sí” y en concreto merece mucho interés decir que según “laudato sí” y siguiendo los documentos del Concilio y otros papas, se han logrado cosas positivas mediante este encuentro: el deseo de Dios, la dignidad de la vida de cada persona, de igualdad entre los seres humanos y el respeto por las diferencias dentro de la única familia humana, el diálogo, costumbre de participación, el anhelo de la paz, la acogida como expresión de solidaridad, la tutela responsable de la creación. Este asunto creo que está muy poco presente en muchos diálogos y reflexiones y es de lo más interesante
-el quinto, que creo de mucho interés, es la opción misionera que se plantea.

Voy a decir algunos hechos que me parece que pueden ayudarnos a plantearnos estos asuntos.

En cuanto a la introducción a mí me gustaría, creo que sería conveniente, un diálogo sobre sí hoy estamos experimentando caminos nuevos. Es decir, en la actividad parroquial de los últimos diez años, yo ¿puedo afirmar con hechos, que ha habido innovaciones o hay más bien repeticiones? [cuestión A]

En cuanto al capítulo primero. El punto de que debe inquietarnos es muy curioso, porque si dice que debe inquietarnos que a muchos no ha llegado la luz de Cristo, está diciendo -por ejemplo- que el centro de nuestra espiritualidad no puede ser la salvación personal para la vida eterna, que es una cosa muy buena, muy presente en otras épocas, y sin embargo no dice eso; dice que debe inquietarnos (y esto forma parte de la mejor tradición de la Iglesia, por otra parte), debe inquietarnos que haya hermanos que vivan sin la fuerza, la luz y el consuelo de la amistad con Cristo. ¿deberíamos de concretar que nos inquieta a nosotros realmente? [cuestión B]

El segundo asunto del capítulo primero. Sobre la contraposición entre si nos mueve el temor a equivocarnos o el temor a encerrarnos sería también muy interesante reflexionar sobre qué iniciativas pastorales hemos frenado por temor. De hecho. No que nos gustaría llegar a todos etcétera `por ejemplo tal iniciativa pastoral ha sido frenada porque tuvimos temor a equivocarnos y hemos permanecido encerrados. Con esto no estoy diciendo que haya que hacer cualquier cosa, estoy diciendo solo que a veces por temor a equivocarnos hemos frenado cosas que pueden ser interesantes. [cuestión C]

El tercer punto que yo creo que merece un buen diálogo es este punto de que la Iglesia se enriquece con la relación con los culturas. Nosotros vivimos a veces demasiado pendientes de que tenemos un gran tesoro que hay que llevar a otros y no tenemos ninguna conciencia, o muy poca conciencia, de que también en ese diálogo crecemos. Como dice literalmente el documento, la Iglesia se enriquece. ¿Nuestra parroquia se enriquece con lo de fuera? ¿En qué? [cuestión D]

El cuarto se refiere a lo logrado, cita a “Laudato Sí”. Sería muy interesante darnos cuenta si nosotros consideramos evangelizar solo a lo que otros llaman anuncio explícito o en la evangelización se encuentra la potenciación de esos asuntos, que pueden parecer, entre comillas, “bastante mundanos” porque no solo se trata de alegrarse de que crezca la igualdad o el diálogo o la paz sino ¿nosotros consideramos eso como fruto del encuentro de la Palabra con el mundo? ¿estamos colaborando en esos asuntos? [cuestión E]

El quinto punto que merece un gran diálogo es la cita literal de la opción misionera, porque citando EG 27, dice que la opción de la transformación de la tarea evangelizadora es una acción misionera dice: capaz de transformarlo todo, para que las costumbres, los estilos, los horarios, el lenguaje, y toda estructura se convierta en un cauce adecuado para la evangelización del mundo actual, más que para la autopreservación. Aquí hay que distinguir: ¿se trata solo de autopreservarse, que mi comunidad siga? o ¿se trata de evangelizar el mundo actual? Muy importante creo. Y luego, también muy importante, ¿qué cosas hay que transformar? Dice todo. No dice pequeños aspectos externos, dice capaz de transformarlo todo. Y en concreto cita:
costumbres
estilos
horarios
lenguaje y
toda estructura
¿hemos cambiado nosotros costumbres? ¿estilos? ¿horarios? ¿lenguaje? ¿toda estructura? [cuestión F]

Este es me parece el riquísimo conjunto de cuestiones que nos plantean la introducción y el primer capítulo. Lo he reducido a seis cuestiones para diálogo