Las entidades españolas disparan los márgenes que aplican en los préstamos, elevan las comisiones y recortan plantillas, pero mantienen beneficios millonarios.
El año 2008 se ha cerrado con beneficios en los grandes bancos y cajas españoles de unos 10.000 millones de euros (contando sólo el que obtienen en España). Pero, paralelamente, en este ejercicio, el crédito se ha desplomado a niveles próximos al 50%. La banca, además, ha ampliado sus diferenciales y cada vez gana más dinero por cada préstamo que concede y mientras el desplome del Euríbor no acaba de trasladarse a los clientes.
A eso se une que bancos y cajas cierran oficinas y despiden a trabajadores. Y afirman que va a seguir haciéndolo.
Al tiempo, el Gobierno ha concedido apoyo a bancos y cajas en forma de liquidez por valor de 20.000 millones, y hay otros 30.000 millones listos para ser usados. A eso se unen otros 200.000 millones de euros en emisiones de las entidades que el Estado está dispuesto a avalar.