Ese es el encabezamiento de un escrito que la adolescente (ahora ya joven) nos dirigió a sus padres.
Con un encabezado así (que lleva veneno amasado) el contenido de la carta es mejor no transcribirlo.
Con un encabezado así (que lleva veneno amasado) el contenido de la carta es mejor no transcribirlo.
El motivo de dicha misiva fue un castigo que le pusimos por no hacer unas tareas que le iban mandando en el cole.
Ahora, varios años después, encuentro esta nota releyendo el libro en el que la guardé, justo en estos días en que la joven termina el bachillerato y se examina de la EBAU.
Y me hace sacar en algunas conclusiones que comparto:
- el castigo estaba mal puesto y por lo tanto, fue bastante inútil para conseguir que hiciera las tareas del cole.
- no fue inútil para que ella entendiera que lo que decimos, lo hacemos, lo cual es un aprendizaje mucho más importante que el de hacer las tareas del cole.
- no acertamos con el castigo, pero es que a ser padres vamos aprendiendo. Es importante acertar, pero más importante aún no dejar de aprender.
- con los hijos hay días de tormenta, pero suele acabar escampando, hay que mantener la calma.
- a pesar de las dudas, no nos hicimos la prueba de paternidad y nos seguimos haciendo llamar sus padres, e incluso ella nos volvió a llamar así, jejeje
- el castigo estaba mal puesto y por lo tanto, fue bastante inútil para conseguir que hiciera las tareas del cole.
- no fue inútil para que ella entendiera que lo que decimos, lo hacemos, lo cual es un aprendizaje mucho más importante que el de hacer las tareas del cole.
- no acertamos con el castigo, pero es que a ser padres vamos aprendiendo. Es importante acertar, pero más importante aún no dejar de aprender.
- con los hijos hay días de tormenta, pero suele acabar escampando, hay que mantener la calma.
- a pesar de las dudas, no nos hicimos la prueba de paternidad y nos seguimos haciendo llamar sus padres, e incluso ella nos volvió a llamar así, jejeje