Señor, te ofrezco mi trabajo en este día;
que mi esfuerzo sirva para la felicidad de los demás
y me ayude a mí a encontrar mi propia paz.
Que mi trabajo sea fuente de alegría,
de satisfacción, de encuentro, de unión.
Que con mi labor sea capaz de ayudar
a la construcción de ese mundo por el que luchamos;
que mi esfuerzo sea fecundo,
que mi acción sea como un regalo para todos.
Señor, recibe con bondad el trabajo,
que en este día vengo a ofrecerte.
Ayúdame a llenarlo de entrega, de verdad, de amor.
Que mi labor sea un pedacito del mundo que busco;
que mi vida sea alegría para todos. Amén